Las constantes enfermedades y problemas de salud asociados al sobrepeso y consumo de alimentos ricos en grasas, azúcares y aditivos químicos han llevado a los especialistas a ofrecer alternativas más dinámicas y menos invasivas para lograr el bienestar físico deseado.
¿Qué es un coach nutricional?
Además de las opciones quirúrgicas o las tradicionales dietas que siempre salen al mercado, han surgido una nueva figura como lo es el coach nutricional que acompaña al paciente a modificar sus esquemas de alimentación y establecer una rutina de salud óptima.
Cada día y sobre todo en las grandes ciudades, muchas personas acuden a este nuevo profesional, no solo para mejorar su físico sino también para crear hábitos positivos en pro de una vida más completa, consumiendo productos más naturales y generando un plan de salud que beneficie tanto el cuerpo como las emociones.
¿De qué trata el coaching nutricional?
Aunque el concepto de coaching nutricional es relativamente nuevo y suele confundirse con el de otros profesionales, esta disciplina busca trabajar de la mano con el paciente para crear un entorno propicio que lleve un cambio de actitud con el fin de modificar los hábitos alimenticios y el estilo de vida.
El comienzo del proceso inicia con la fijación de un objetivo claro y concreto que sobre todo sea realista y medible para ser cumplido ya que de nada sirve un sueño sino se le ponen patas.
En consonancia con los objetivos se debe establecer unos factores motivacionales sólidos que se generen gracias al conocimiento específico de todos los beneficios que se obtendrán con el comienzo del plan, tanto físicos como emocionales.
Los entrenadores tienen la tarea de hacerte ver cuáles son tus obstáculos, aquellos factores que te limitan a conseguir el camino correcto, entendiendo así como aquellas barreras que te impiden seguir adelante traducidas casi siempre en excusas como: “No tengo tiempo para hacer ejercicios” o “No sé cocinar”, estableciendo acciones específicas que ayuden a concretar los objetivos.
Después el coach se encarga de que ese objetivo siempre esté presente en tu rutina, bajo la premisa de que lo urgente no siempre es lo más importante, recordándote siempre y a todo momento para evitar olvidarla. A este nivel del proceso este especialista también se encarga de trabajar con tus emociones y de cómo influyen en tu alimentación.
Más adelante se establecen las opciones idóneas para concretar la estrategia establecida en el plano alimenticio trabajando a la par con las creencias limitadoras transformándolas en creencias potenciadoras. En este punto se trabaja para generar una actitud optimista, pero al igual que con la motivación, desde una perspectiva inteligente y positiva, siempre con la convicción de que todo va a mejorar.
Por último se presenta un plan de alimentación personalizado en el que se establece lo que te gusta comer y que no te gusta comer, los horarios y otros elementos de importancia para el cambio integral. Aquí el trabajo del coach se afianza más ya que más que una dieta, el plan te permite tomar conciencia de lo que debes hacer y cómo mejorarlo a base de constancia y voluntad.
Para quién está dirigido el coach nutricional
Como todo entrenador, el coach nutricional diseña un plan alimenticio que se adapta a la idiosincrasia de cada paciente acompañándolo en todo momento a adaptarse a todos los cambios y superar las barreras con voluntad e inteligencia emocional.
Para poder lograr estos objetivos de vida se necesita que el coach nutricional sea un profesional con cualidades probadas como empatía, interés por las personas, compromiso y responsabilidad y mucha inteligencia emocional para enfrentar las situaciones a venir.
Aunque esta disciplina es relativamente nueva y surgió a partir del entrenamiento a deportistas de élite, el coaching nutricional está dirigido a un público mucho más amplio que un atleta de atleta de alto rendimiento, solo necesita la voluntad para cambiar.
Para empezar esta rutina de cambio puede ser recomendada a aquellas personas que deseen entrenarse para comer bien, sano y saludable o simplemente quieren llevar un modo de vida lleno de bienestar.
Otro tipo de persona a quien se le recomienda solicitar la ayuda de un coach nutricional son aquellas que tienen una relación sórdida con la comida que va más allá de la necesidad biológica de alimentarse, personas con adicciones que ahogan sus problemas emocionales en el placer falso que puede producir un alimento como las frituras o los azúcares; en este caso lo que trabaja el coach es que el individuo busque auto gestionarse y deje atrás esa sensación de angustia y ansiedad mediante el coaching nutricional en Barcelona.
Cambiar los hábitos y el estilo de vida
Las personas que quieren cambiar radicalmente su estilo de vida y llevar un estilo fitness también buscan al coach nutricional para que los ayude a la búsqueda del conocimiento pleno sobre la alimentación y que les permita mejorar su físico, su salud y por ende la calidad de vida.
Por último esta disciplina es recomendada para aquello que tienen severos problemas de salud y se les dificulta mejorar sus hábitos alimenticios, como las personas con problemas de sobrepeso, diabetes u obesidad mórbida y que requieren de pautas muy concretas para el cambio además de ayuda externa en muchos casos.
De esta forma el coaching nutricional se complementa junto con las demás disciplinas médica y deportivas existentes para ofrecerles a las personas una alternativa idónea de cambio, tanto del cuerpo como de su salud.